1 No tendrás tareas ajenas a tu deber para con tu clase de Escuela Dominical. 2. No tendrás ídolos en tu vida. No te inclinarás a ellos ni los honrarás. Darás al Señor tu Dios
Pontodos tus talentos al servicio del Dios que te los dio, y gozarás de una paz y felicidad internas que las palabras humanas no pueden describir. Amigo y
Poemaa una Madre que ya no está – Vicente Riva Palacio. Como una expresión de nostalgia encontramos un poema bellísimo del poeta Vicente R. Palacios. Sus palabras le hacen una alabanza al tiempo y la huella maternal que deja la abuela en la vida. La imagen que este poema muestra es una sensible unión con la figura amorosa de la Acompañela lectura en audio. ¡Señor! Tú que enseñaste, perdona que yo enseñe; que lleve el nombre de maestra, que Tú llevaste por la Tierra. 1. Dame el amor único de mi escuela; que ni la quemadura de la belleza sea capaz de robarle mi ternura de todos los instantes. 2. Maestro, hazme perdurable el fervor y pasajero el desencanto.Poema Maestrito de puebloAutor: Abraham Rivera SandovalIntérprete: Génesis GarcíaMúsica: Silencio, Sonidos de fé.6YZJ1D.